Una amiga mía me dijo una vez que el hombre que las estrellas tenían reservado para mí debería ser europeo y yo asentí.
Tiempo después, una noche a finales de invierno del año pasado, conocí al europeo. Fui a una cena y sólo quedaban tres sitios libres en el extremo de una larga mesa, los precisos para las tres que llegamos, y así fue cómo me senté frente a él.
Si en ese momento hubiera sabido que él era el europeo, me hubiera sentado a su lado, lo hubiera acariciado como si fuera un gato y lo habría embrujado para siempre.
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4 comentarios:
Tienes tantas cosas que explicarme cuando recuperes la voz!!! jajjaja No sabes cuánta ilusión me ha hecho volver a verte por estos lares, el corazón me ha saltado cuando te he visto!! Te adoro y quedamos que me explicas la semana que viene quien es tu europeo!! :-)
bien vale tu desaparición bloggera si has estado disfrutando de la presencia en el mundo de "el europeo" :)
Un beso
:) encontraste teu europeu? adorei a história. Boa sorte! Bjs Laura
Me hiciste caso en julio y escribiste, pero sigue estando muy abandonado y se echa mucho, pero mucho de menos tu vision bloguera del mundo.
¿Cuanto más tendremos que esperar para que te avefenixees?
B7s
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